Retrato de Caracalla (Roma)
RETRATO DE CARACALLA
1. IDENTIFICACIÓN
Clasificación
Este busto, el cual se desconoce el autor, está datado entre los años 201 y 233 d.C., entrando dentro del estilo de Roma, y creado en la escuela del Bajo Imperio. El emperador Caracalla, cuyo nombre original era Lucius Septimius Bassianus fue un emperador romano de la dinastía de los Severos, hijo del entonces gobernador de la provincia de la Gallia Lugdunensis y futuro emperador Septimio Severo y de la siria Julia Domna. Su cronología debe situarse por ello entre los años 212 y el 217, años en los cuales Caracalla gobernó Roma de forma individual, pero este vivió desde 188 hasta 217.
El sobrenombre de
«Caracalla» se le atribuye ya que usaba a una capa larga de origen galo cuyo
uso introdujo en Roma; aunque dicho sobrenombre se utilizó para referirse a él históricamente.
Cabe destacar
que el busto de
Caracalla es de estilo romano, obviamente, y existen varias copias en los
museos vaticanos y del Louvre. El original se encuentra en el British
Museum, donde llegó tras la adquisición de parte de la colección
Townley en 1812.
Descripción
Esta obra se trata de un busto de mármol, el cual se caracteriza por las rudas facciones y expresiones de esta cara. Representa al emperador Caracalla, el cual fue conocido por su severidad y fortaleza. Esta obra se caracteriza por las diferentes innovaciones que encontramos respecto a retratos anteriores de reyes y emperadores, tanto en aspectos formales como las incisiones en el pelo y en la barba, como en el dinamismo que refleja esta fuerza y severidad.
2. ANÁLISIS FORMAL Y ARTÍSTICO
Aspectos formales
Respecto a la creación de esta obra, está esculpida en
mármol, y presenta unas dimensiones de 70 x 46 cm. Los aspectos que más
caracterizan a esta obra son, el claroscuro de sus cejas fruncidas, la
profundidad y el detallismo de su mirada, ya que podemos ver que tiene
rehundidas las pupilas y los labios entreabiertos, que nos reflejan a un hombre
fornido, impulsivo o incluso cruel. Presenta una mirada oblicua y concentrada, además,
de una frente arrugada que da sensación de severidad.
El gesto amenazador del ceño en forma de V, acentuado
por la hinchazón de los músculos de la frente, y la mueca de hastío de la boca,
son los aspectos que dan la expresión de tirano y de loco furioso.
El retrato de este soberano inicia una
nueva tendencia que mantendrá su influencia después de Caracalla, en aspectos
como la desaparición de los surcos abiertos por el trépano y cambios en el
corte y la ejecución del pelo y de la barba, ambos muy cortos y ajustadas a la
cabeza y a la cara, realizándose entalladuras para resaltar los rizos, recurso
que utilizarán muchas artistas durante el resto del siglo III. El pelo del
bigote y de las patillas se representa por medio de puntos y escisiones que reemplazarán
a las barbas plásticas. Pero el hecho más característico de esta nueva serie, y
sobre todo de la figura de Caracalla, es la fuerte expresividad en el gesto del
retratado.
Valores
artísticos
Este busto de Caracalla representa el punto álgido del realismo romano. Cabellos cortos y rizados, incipiente barba, pliegues, todo creado en la superficie del mármol. Este retrato muestra la agresividad física de la que estaba dotado el emperador. La expresión dura y violenta que muestra en su rostro nos permite hacernos una idea del temor que causó Caracalla a sus adversarios germanos y partos.
La imagen de severidad y energía la utilizaba para
mantener la disciplina en el ejército, aunque murió asesinado por un oficial. Esta
visión de severidad es intencionada, ya que él pretendía alentar desde sus
propios retratos oficiales, hechos sin duda por un gran artista, pero siguiendo
las indicaciones de Caracalla. Este gesto de energía y dinamismo será modelo de
escultores renacentistas y barrocos para representar a jefes militares. Cabe
destacar que se piensa que la pose, cabeza torcida, está inspirada en Alejandro
Magno, ya que cuando el padre de Caracalla murió, este creyó ser la
reencarnación de Magno, aunque la pose que este utilizaba se debía a su
enfermedad.
El legado más importante de su
mandato fue el llamado Edicto de Caracalla o Constitutio
Antoniniana, por el cual se extendía la ciudadanía romana a todos los
habitantes libres de las provincias. Dicha medida, dio un gran impulso a la
romanización, al dejar al margen de la ciudadanía sólo a las poblaciones
rurales y a los bárbaros instalados en las fronteras. Caracalla,
en Roma impulsó grandes construcciones, como las termas que llevan
su nombre.
3. COMENTARIO
Conclusión o valoración
En conclusión, esta obra representa la
introducción de diferentes innovaciones a la hora de hacer retratos de reyes y
emperadores. La forma en la que está esculpido el mármol ha creado un busto con
gran expresividad, con rostro severo y que representa la fuerza. Además, los rasgos
físicos del gobernante se difundían a través tanto de la moneda como de la
estatuaria que presidirá las construcciones públicas más relevantes como
circos, teatros o foros.
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