Palacio Barberini (Barroco italiano)

 

PALACIO BARBERINI

1. IDENTIFICACIÓN, LOCALIZACIÓN.

Clasificación

El Palacio Barberini se encuentra en Roma, Italia y este fue diseñado por el conocido arquitecto del barroco Carlo Maderno, el cual perteneció más concretamente a la transición, y el palacio está datado entre los años 1625 y 1633. La construcción del palacio fue un encargo de la familia de Maffeo Barberini, por esto el palacio recibe este nombre. Maffeo Barberini fue el nombre de nacimiento del Papa urbano VIII, el cual quería plasmar su poder y su escalafón social, aparte de satisfacer sus necesidades.


Esta obra la comenzó Maderno, el cual propuso en un principio construir un gran bloque cuadrado el cual presentara cortile con arquerías, además fue responsable de la fachada y de sus alas laterales. Cuando este arquitecto murió Bernini se hizo cargo del proyecto, reformando así la fachada principal y la escalera de honor. Además de esto, el también conocido arquitecto Borromini ayudó y asistió a ambos, por lo que a él se le atribuyen las ventanas laterales y la escalera oval.

Descripción

Esta obra arquitectónica se caracteriza por su planta en forma de H, la cual hace que de la fachada nazcan dos alas perpendiculares a esta. Lo que más destaca en un primer momento es su fachada, la cual tiene tres pisos divididos en siete vanos, en el primer piso encontramos siete arcos, en el segundo piso encontramos siete ventanas rodeadas de columnas de orden jónico, y en el tercer piso se repiten las ventanas, pero con columnas de orden corintio. Además, en el centro de esta fachada encontramos el característico escudo de la Familia Barberini. En la parte interior encontramos diferentes estancias decoradas con frescos, y en la parte trasera del palacio encontramos un jardín.


2. ANÁLISIS FORMAL Y ARTÍSTICO

Aspectos formales

La situación de esta obra arquitectónica se debe a que el Papa Urbano VIII compró un solar contiguo a la familia Sforza, y además, contrataron a uno de los arquitectos más célebres de la época, Maderno; aunque también intervinieron en la construcción Bernini y borromini.

Lo primero que se aprecia de este edificio es que presenta tres pisos, en los cuales encontramos diferentes órdenes arquitectónicos, como ocurre en el coliseo romano. Además, es característicos como el piso inferior está abierto, dando un aspecto de loggia; por otra parte, en cada piso entramos siete vanos, en los cuales encontramos ventanas. Todo este conjunto de elementos hace que la fachada nos dé un aspecto calado.

Asimismo, en la fachada encontramos el característico escudo de la familia Barberini, en el que encontramos tres abejas, ya que las abejas han sido desde siempre un símbolo de laboriosidad, elocuencia y dedicación.


Este palacio presenta una planta en forma de H, por lo que encontramos un cuerpo central abierto al exterior (la fachada), y dos alas laterales. Este cuerpo central fue realizado por Bernini, y apreciamos un increíble pórtico el cual presenta un conjunto de siete arcos de dóricos, sobre estos encontramos dos cuerpos más, en los que encontramos en cada uno siete ventanas; el central presenta columnas de orden jónico, y el superior de orden corintio.

Además, cabe destacar que los arcos que encontramos en el último piso presentan un efecto óptico de perspectiva en relación con la profundidad, esto se debe a que están construidos con dos arcos concéntricos los cuales se alzan sobre dos bases de un trapecio simétrico, y además están unidos por planos inclinados en relación con la fachada.

En cuanto al interior de este increíble palacio, este está ordenado matemáticamente, ya que lo primero que encontramos al entrar es un amplio vestíbulo con forma oval del que salen diferentes direcciones, tanto a la planta noble como al jardín.  Este esquema se va repitiendo de forma que se va dando paso a las diferentes estancias. Además, en el centro de esta construcción encontramos un gran salón, el cual se corresponde en la fachada con los dos pisos superiores; este gran salón está decorado con frescos de Pietro de Cortona, y en ellos encontramos representados la Alegoría de la Divina Providencia y la fuerza de los Barberini.

Cabe destacar, que esta decoración fue influyente en la orientación de la decoración de diferentes techos de iglesias y palacios, como podemos, por ejemplo, en los frescos de San Ignacio o en el Salón del Trono del Palacio Real de Madrid.


En cuanto a la planta noble, encontramos dos escaleras por las que acceder a esta, una gran escalera cuadrada a la izquierda, obra de Bernini; y otra escalera helicoidal a la derecha obra de Borromini.

Por otra parte, en las habitaciones situadas en la planta noble también encontramos diferentes frescos, en esta ocasión de artistas del siglo XVII como Bernardino Passeri, Giuseppe Arcimboldo y Andrea Camassei. En cuanto al jardín, este es conocido como “giardino segreto”, es decir, jardín secreto, ya que este no está a la vista en un primer momento, y lo encontramos en la parte trasera del palacio.


Valores artísticos

Dentro de este increíble palacio barroco encontramos la Galería Nacional de Arte Antigua, la cual se encuentra en esta localización desde mediados del siglo XX; en esta galería encontramos colecciones procedentes de diferentes familias nobles romanas. Además, dentro de este palacio, en la galería, encontramos una gran cantidad de obras que nos ofrece la oportunidad de hacer un recorrido por la historia de la pintura desde el siglo XIII hasta el siglo XVIII. Obras como “Narciso en la fuente” de Caravaggio o “La virgen con el niño” de Lippi, con algunas de las obras que podemos encontrar.

Y es que hasta hace una fecha reciente este edificio estaba ocupado por un organismo militar, por lo que las colecciones pictóricas que encontrábamos en el interior estaban concentradas en unas pocas salas. De esta forma en enero de 2012 se habilitaron unos 1000 metros cuadrados de espacio para exposiciones.

Además, cabe destacar que por este palacio pasaron reyes como Carlos IV, pues fijó su residencia en el palacio tras su exilio, desde mediados de 1814 hasta su muerte en 1819, cabe destacar que días antes también murió en esta residencia la reina María Luisa de Parma.


3. COMENTARIO

Conclusión o valoración

En conclusión, este edificio es una clara representación de la arquitectura del barroco italiano, ya que aparte de ser un increíble palacio, este contó con la intervinieron de tres de los arquitectos más importantes de la época, Maderno, Bernini y Borromini.

Este increíble palacio ha tenido diferentes funciones a lo largo de la historia, pues en un primer momento fue creado para la familia Barberini, más tarde fue residencia de Carlos IV y su familia, también fue el espacio de un organismo militar, y en la actualidad y desde mediados del siglo XX, encontramos dentro de él Galería Nacional de Arte Antiguo, ofreciéndonos así la oportunidad de hacer un recorrido por el arte y la pintura desde el siglo XIII hasta el siglo XVIII.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Eneas, Anquises y Ascanio (Barroco italiano)

El festín de Herodes (Quattrocento)

Cristo atado a la columna (Barroco español)